Decían que volaba

No soy lo que tu crees que soy. Ni yo misma soy lo que creo ser. No soy invierno, ni verano. No soy la voz, ni la musica. No soy el sol, ni la luna. No soy el llanto, ni la risa. No soy una gota de lluvia, ni miles de ellas. No soy el alcohol de tu bebida. No soy el resultado de millones de planes trazados, ni lo que la sociedad quiere que sea. No sigo tus pasos. No rompo mis principios. No araño mis recuerdos. No creo. No soy Pandora, pero siempre estoy ahí.

- Entonces, ¿quién eres?

Soy la primavera de tus inviernos. Soy la letra de tu canción. Soy una estrella de entre otras tantas, que te observa de lejos con una sonrisita. Soy el silencio. Soy la gota que resbala por tu ventana un día de esos de los de quedarse en casa. Soy un segundo, un momento, un santiamén. Disparo las flechas que Cupido me regaló y evito que el odio nos mate. Capturo recuerdos con palabras. Soy una ráfaga de viento. Soy quien dispara globos de agua a la tristeza, quién pinta de colores el cielo cuando éste se despierta triste. Soy tu peor pesadilla y tu mayor satisfacción. Soy una llamada de telefono. Un semáforo en ámbar, un salto hacia el vacio, un paseo por las nubes. Soy libre...

Y eso es lo primero que no debes olvidar.